PROPIEDADES COSMÉTICAS DE LA ARCILLA ROJA.

Como norma general, todas las arcillas cosméticas aplicadas en mascarilla, ejercen sobre la epidermis una suave acción exfoliante que elimina las células muertas. Además absorben el exceso de seborrea y dejan la piel suave, tersa y radiante.

No sólo absorben y limpian los poros del exceso de seborrea, también limpian de impurezas y toxinas la epidermis. Además mejoran la circulación sanguínea y calman inflamaciones e irritaciones, tanto de la piel, como musculares y articulares.

Autor: Elena Arjona. Cosmetóloga de BioVegetalis.

Pero es importante saber, que dependiendo del tipo y características de cada arcilla, será más o menos apropiada para determinados tipos de piel. Unas son más apropiadas para pieles jóvenes, grasas incluso acnéicas y otras por el contra, son más apropiadas para pieles secas, maduras y con tendencia a la deshidratación.

ARCILLA ROJA

En este artículo nos vamos a centrar en describir las propiedades cosméticas de la arcilla roja. Es muy rica en óxidos de hierro, de ahí su color rojo característico. También es muy rica en sílice.

Es quizás la más apropiada para pieles mixtas y  con moderada tendencia grasa. También sería la más apropiada para efectuar limpiezas faciales que eliminen impurezas en adolescentes y personas jóvenes, que si bien pueden tener tendencia grasa, no llegan a tener acné generalizado, pero sí puntos negros y exceso de impurezas en la epidermis.

Al ser un fenomenal agente limpiador dérmico, es un ingrediente ideal para formular jabones depurativos corporales para toda la familia.

MASCARILLA SIMPLE CON ARCILLA ROJA.

Con periodicidades que pueden ir desde una vez por semana, hasta una vez al mes, es conveniente hacerse mascarillas depurativas y ligeramente exfoliantes, ya sea en toda la epidermis corporal o sólo en la cara.

Una receta muy sencilla y efectiva es mezclar una cucharada sopera de arcilla en un bol cerámico. Ir añadiendo agua hasta conseguir diluir toda la arcilla en una pasta densa, pero sin grumos o restos de arcilla en polvo. Aplicar por toda la epidermis con masajes circulares, evitando el contorno de labios y ojos. Dejar sobre la piel hasta que la arcilla se seque. Posteriormente retirar la totalidad de la mascarilla, primero con agua templada, para finalizar con agua fría. Seguidamente tonificar la piel aplicando un agua floral de ( rosa damascena, hamamelis, azahar…). Con la piel todavía algo húmeda aplicar la crema facial o el aceite vegetal BIO, poca cantidad, masajeando circularmente, estimulando la circulación y haciendo penetrar el preparado en la epidermis.

Al concluir, notarás tu piel fina, suave, radiante, tersa, libre de células muertas e hidratada. Recuerda que la correcta higiene y la limpieza depurativa, son ineludibles para la correcta salud estética.