LOS LODOS EN COSMÉTICA.

Como veremos en los sucesivos artículos que vamos a publicar en este blog, tanto los lodos (también llamados fangos o barros), como las arcillas, se utilizan con frecuencia desde tiempo inmemorial para solucionar problemas dérmicos y del sistema locomotor. Sus altos contenidos en oligoelementos minerales les hacen muy apreciados para evitar el envejecimiento, eliminar células muertas, combatir las arrugas y fortalecer el colágeno.

Artículo de Ángel Labib, asesor de BIOVEGETALIS en temas de tratamientos termales, hammam andalusí y tratamientos estéticos tradicionales del Mediterráneo.

LOS LODOS.

Por sus altos contenidos en zinc, magnesio y cobre facilitan al organismo la producción de colágeno y elastina.

Los lodos termales, también denominados fangos o barros, a diferencia de las arcillas, se extraen del fondo de lagos que albergan aguas con propiedades termales y terapéuticas.

También en cosmética son muy apreciados los lodos marinos (limos), puesto que en su composición están todos los minerales presentes en el agua de mar. De este grupo, el más rico y apreciado por sus propiedades curativas son los lodos del Mar Muerto debido a su alta concentración de minerales, la más alta de todos los mares del planeta. Los barros del Mar Muerto, proporcionan a la piel, todos los oligoelementos necesarios para su regeneración saludable.

Los lodos, tanto los termales como los marinos, a diferencia de las arcillas, además de gran concentración de minerales beneficiosos para la salud estética, tienen gran cantidad de “detritos”, es decir, materia orgánica en forma de sedimentos de microorganismos fósiles acumulados durante miles de años en los fondos. Estos oligoelementos orgánicos también son muy beneficiosos para tratamientos faciales, corporales y terapéuticos.

Lógicamente, los lodos utilizados en cosmética deben de cumplir unos controles microbiológicos para garantizar su salubridad. 

Los lodos marinos son además ricos en yodo. El yodo favorece la eliminación de toxinas acumuladas en la piel. Además es estimulante y anti-inflamatorio Los lodos marinos ( especialmente los barros del Mar Muerto) son muy recomendables para tratar problemas de celulitis, artrosis, artritis, escemas o psoriasis, ect...

Tanto los lodos termales como los lodos marinos son recomendables para depurar la piel en profundidad, eliminar el exceso de grasa cutánea sin afectar a las zonas más secas, estimular la producción de colágeno y elastina fuerte y saludable, por tanto actúan contra la flacidez de los tejidos. Son muy recomendables para eliminar células muertas e impurezas, fortalecer el sistema locomotor especialmente en personas con problemas de artritis y artrosis. También ejercen una suave pero efectiva acción exfoliante que elimina durezas en codos, talones y callosidades.

Como veis la fangoterapia con lodos termales o marinos está recomendada para todo tipo de pieles y para solucionar o mejorar infinidad de problemas dérmatológicos. La piel queda suave, renovada, limpia, desintoxicada y elástica.

Se pueden utilizar directamente en emplastos corporales, faciales ( salvando la zona de los párpados) o en fórmulas de jabón en combinación con aceites altamente nutritivos y conseguir un efecto placentero inigualable. 

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PRODUCTOS DE COSMÉTICA CON LODOS MARINOS.

JABÓN BIO CON BARROS DEL MAR MUERTO.

Sin duda, la manera más placentera de beneficiarnos de las propiedades dermo-cosméticas de los barros del Mar Muerto.

Con todos sus ingredientes vegetales certificados de cultivo ecológico. Es la fórmula más efectiva para higienizar a diario la piel madura y para estimular la regeneración celular en todo el cuerpo.

Depura la epidermis de toxinas e impurezas y ayuda a eliminar las células muertas más superficiales, dotando a la piel de suavidad, tersura y luminosidad natural.

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